Estamos felices porque ha llegado el momento de la floración de nuestra viña. En el caso de la vid no es una floración propiamente tal ya que no existen pétalos visibles, pero sí una estructura verde llamada calíptra, comúnmente conocida como capucha o tapa.
En Checura, este proceso ocurre generalmente entre la primera y última semana de noviembre y es muy especial porque marca nuestra producción que, al ser orgánica y natural, incentivamos mediante el desbrote, buscando distribuir la savia y fomentando la vigorosidad de la planta.
En nuestro caso siempre permitimos que las parras convivan con las mal llamadas malezas. Hemos observado mucho la naturaleza y nuestra viña y a diferencia de lo que se cree comúnmente, esta asociación permite proteger la vid y desarrollar procesos de elaboración mucho menos invasivos y más reales y naturales.
